La mediación, como sistema pacífico y positivo de resolución de conflictos, es aún bastante desconocida en nuestro país. Sin embargo, si los ciudadanos fueran conocedores de sus ventajas estoy segura de que estaría más presente en nuestra sociedad.
Como primer post, he querido unir dos de mis especialidades la mediación y el derecho sanitario.
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¿Aún no sabes que este sistema también se puede aplicar a las controversias surgidas en el ámbito sanitario?
En los últimos tiempos el derecho sanitario ha ido estudiando cómo se podría desarrollar la mediación en este ámbito, donde los conflictos que se originan cada día son más numerosos y necesitan de una solución rápida y eficaz.
Cada vez más hospitales van creando equipos de mediación de conflictos en centros sanitarios, espacios donde resolver conflictos generados entre los profesionales sanitarios y usuarios, entre los propios facultativos (derivados por ejemplo de problemas de jerarquía) o entre los usuarios y la propia institución sanitaria.
En este post nos vamos a centrar en el papel que tiene el mediador sanitario.
Tercero imparcial: neutralidad
En cualquier proceso de mediación, podemos definir al mediador como una persona neutral, un tercero imparcial, que está encargado de moderar las sesiones eliminando las barreras de escucha que habitualmente impiden a las partes relacionarse, y de esta forma promueve un acercamiento de sus posiciones a fin de que estos puedan entenderse mutuamente y con ello, lograr un acuerdo.
Sin poder de decisión
El mediador carece de poder de decisión (a diferencia de un Juez o un árbitro), sino que trabaja para reestablecer la comunicación entre las partes con el propósito de que éstas sean capaces de llegar a un acuerdo válido para ambas que ponga fin a sus controversias.
En el ámbito sanitario, el mediador debe ser una persona especialmente sensible y empática, ya que los problemas a los que se enfrentará serán de gran envergadura.
Deberá afrontar conflictos provocados por situaciones de fallecimientos que se puedan dar en los servicios de urgencias de un hospital, o en supuestas negligencias derivadas de una mala praxis del profesional sanitario.
El mediador, como tercera persona neutral en el conflicto, tiene un rol conciliador en el ámbito sanitario, mediante la comunicación debe ayudar a mejorar la relación intrapersonal entre las partes del conflicto.
La principal necesidad ante la que se encuentran los pacientes y usuarios de centros sanitarios cuando se enfrentan a un escenario diferente al que ellos esperaban (una complicación en el tratamiento, efectos secundarios derivados de un medicamento o de una intervención, un fallecimiento…) es la necesidad de comprender qué pasó, cómo pasó y porqué pasó.
La clave como mediador ante estas situaciones es la comunicación, debe ser capaz de que las partes implicadas tengan la oportunidad de hablar y ser escuchados para que puedan dar respuestas a estas preguntas.
Hacer sentir parte a los pacientes en los procedimientos de mediación
Asimismo, debe hacer sentir parte a los pacientes en los procedimientos de mediación, legitimándolos para que se sientan en posición de igualdad y no de desventaja o inferioridad ante el médico, institución o centro sanitario. Y deberá velar por que todos los intervinientes se sientan tratados con dignidad y respeto.
Conclusión
Como conclusión, deberá tratarse de un profesional que tenga conocimientos en materia de mediación, en el ámbito sanitario y deberá conocer las peculiaridades de cada caso antes de iniciar el proceso de mediación con las partes.
Es necesario visibilizar la mediación en todos los ámbitos, incluidos el sanitario, y su utilización como medio para resolver conflictos, alternativo a la vía judicial. Los conflictos son inherentes a los seres humanos pero con las herramientas de comunicación adecuadas y una buena formación de los mediadores podemos mejorar la calidad de vida y de trabajo de todas las personas que integran el complejo sistema hospitalario. Esperemos que pronto todos los hospitales de nuestro país cuenten con equipos especializados de mediación que apuesten por un sistema pacífico de resolución de conflictos.